Unidos contra el castigo físico y la violencia contra la niñez

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El 5 de octubre, con 19 votos a favor y 0 en contra, la Comisión Primera del Senado aprobó en tercer debate el Proyecto de Ley número 320 con el que se busca erradicar cualquier método de violencia para corregir a los niños, dejándolo a solo una votación de la plenaria del senado, para convertirse en ley de la república.

La iniciativa prohíbe el uso del castigo físico, los tratos crueles, humillantes o degradantes y cualquier tipo de violencia contra niños, niñas y adolescentes por parte de cualquier persona encargada de su cuidado, en cada uno de los diferentes entornos en los que transcurre la niñez y la adolescencia.

En su comentario sobre el avance del proyecto, el senador Carlos Guevara, indicó que “El proyecto de ley actual ajusta los temas de redacción y en precisión de términos, manteniendo las normas de crianza y el ejemplo de los padres sobre los hijos”, y agregó que su aprobación es “un mensaje muy positivo para el país”.

Los senadores han insistido también en que el proyecto de ley no da cárcel a los padres que recurren al castigo físico para corregir a sus hijos, sino que este dispone medidas para que entidades como el ICBF puedan acompañar a las familias para desarrollar mejores pautas de crianza. Aun así, se advierte que en aquellos casos en los que se evidencie lo que otras leyes ya aprobadas han definido como maltrato contra niñas, niños y adolescentes al interior del hogar, esto traerá consigo las consecuencias penales, ya contempladas en la ley colombiana.

Por otra parte, los ponentes impulsadores del proyecto resaltan en que este plantea el impulso de una estrategia pedagógica que permita que los padres de familia puedan tener nuevas herramientas para educar a sus hijos, puesto que las prácticas de crianza violentas se encuentran muy arraigadas en muchos contextos sociales y es necesario un proceso de pedagogía familiar para transformarlas.

La Sociedad Colombiana de Pediatría, en una carta dirigida al Congreso de la República del 10 de septiembre de 2020, manifestó su apoyo irrestricto al proyecto, destacando que la evidencia científica muestra claramente que el castigo físico presenta graves riesgos para la formación de los niños, niñas y adolescentes, toda vez que no promueve el arrepentimiento frente a las conductas castigadas sino el resentimiento, tampoco promueve el respeto sino el desprecio, no inspira admiración sino temor, no promueve deseos de enmienda sino de venganza y que no promueve la colaboración sino la hostilidad.

Daniel Ortiz, psicólogo de Bethany Global Colombia, señaló respecto a la aprobación del proyecto en un mensaje conjunto con la Alianza por la Niñez Colombiana: “creo que el castigo físico insensibiliza ante las experiencias violentas a niños, niñas y adolescentes además de normalizar y justificar el uso de golpes en la resolución de conflictos. Por ello apoyo la aprobación del proyecto de ley que prohíbe el castigo físico denigrante y humillante en contra de la niñez”.

La Alianza por la Niñez Colombiana, plataforma de sociedad civil integrada por organizaciones y redes de carácter internacional y nacional enfocadas en la promoción y defensa de derechos de la niñez, ha venido impulsando el proyecto con diferentes agremiaciones de la sociedad que incluyen entre otros, sectores profesionales, religiosos, de academia, de salud, de padres de familia, de niñas, niños y adolescentes, entidades de ayuda, celebridades, activistas, y a todos los grupos sociales interesados en erradicar la violencia contra la niñez, en torno a iniciativas comunes que tengan como fin mejorar la calidad de vida de la niñez en Colombia. Bethany Colombia ha sido parte activa de este movimiento y ha manifestado su apoyo a la iniciativa legislativa que hoy celebramos y que está transformando el presente y el futuro de la niñez colombiana.