Juventud con paso firme, un espacio para el empoderamiento de menores de edad
Desde el año 2013, miles de personas empezaron a migrar desde Venezuela hacia otras partes del mundo. Los primeros en emprender el viaje fueron los profesionales, luego les siguieron millones de personas del común. En la actualidad se estima que más de 6 millones de personas han salido del país y se encuentran en otras naciones. Una gran proporción de estos migrantes se encuentran en Colombia. Según datos de Migración Colombia, cerca de 1.800.000 migrantes venezolanos residen en el país.
La crisis económica, social y política por la que atraviesa Venezuela ha empujado a millones de personas a huir de su país en busca de mejores perspectivas de vida. Sin embargo, encontrar nuevos entornos y proyectos de vida no siempre es fácil para todos aquellos que deciden migrar; las limitaciones económicas, las actitudes de xenofobia y hostilidad por parte de los ciudadanos nacionales de los países a los que llegan, pueden ser solo algunos de los obstáculos a los que se enfrentan los migrantes. En este contexto, los migrantes son una de las comunidades más vulnerables a las que las organizaciones de ayuda humanitaria sirven, y de entre ellos, los menores de edad son especialmente unos de los grupos poblaciones que más ayuda requieren para lograr su plena integración en sus nuevas comunidades.
Entre los migrantes venezolanos, actualmente más de 470.000 niños y jóvenes han ingresado a las instituciones escolares colombianas, aunque todavía hay muchos más niños y adolescentes sin atender por parte de las instituciones colombianas. Muchos de ellos se enfrentan a grandes dificultades como la falta de recursos para útiles escolares y tecnologías educativas, así como la carencia de una alimentación adecuada y la inexistencia de redes de apoyo que los protejan de los riesgos sociales a los que se enfrentan. Estos son los grandes desafíos que las organizaciones de ayuda como Bethany intentan enfrentar cada día por medio de su trabajo humanitario con el propósito de que la población infantil y juvenil pueda gozar de un mejor futuro y accede ra todos sus derechos fundamentales en igualdad de condiciones.
El Programa Juventud con Paso Firme
Durante el 2021, en cooperación con la Oficina de Naciones Unidas para los migrantes y los refugiados (ACNUR) y la Corporación de profesionales para el desarrollo integral comunitario, Corprodinco, Bethany Colombia desarrolló el Programa Jóvenes con Paso Firme, un conjunto de cursos intensivos dirigidos a menores de edad migrantes en la ciudad de Cúcuta, en el Norte de Santander.
Los cursos y talleres llevados a cabo por Bethany y Corprodinco se enfocaron en tres áreas fundamentales: El arte y la cultura, la danza y el fútbol. Estos se enfocan en la mitigación y eliminación de riesgos a los que se enfrentan los menores de edad venezolanos en medio de sus comunidades de acogida. Algunos de estos riesgos pueden incluir los embarazos de adolescentes, el trabajo y la explotación infantil, así como el consumo de sustancias psicoactivas, el desaprovechamiento del tiempo libre y el reclutamiento por parte de organizaciones al margen de la ley para el desarrollo de actividades ilícitas.
La migración y el desarraigo pueden llevar a que muchos jóvenes se sientan solos e impotentes frente a su nueva realidad, enfrentando las perspectivas de enfermedades mentales o de actividades que pongan en riesgo su integridad física y mental. Los talleres llevados a cabo por Bethany y las demás organizaciones que participan en este proyecto buscan que los jóvenes desarrollen habilidades y capacidades nuevas que les permitan enfrentar por sí mismos sus nuevos contextos de vida.
El programa se encuentra dividido en tres áreas, las cuales son: Arte, fútbol y danzas. Cada una de estas áreas busca llegar a una gran multitud de jóvenes, reconociendo la diversidad de sus intereses y potencialidades, constituyendo así en espacios para el aprovechamiento del tiempo libre y para el aprendizaje.
De la misma manera, uno de los objetivos fundamentales de esta serie de cursos y talleres es que los niños, niñas y adolescentes puedan fortalecer su sentido de la autoestima y desarrollar toda una serie de valores que puedan integrar y aplicar en su cotidianidad.
El mismo nombre del programa, “Juventud con paso firme”, nos indica la visión esencial de las organizaciones que auspician este espacio, la cual es convertirse en un entorno de aprendizaje y desarrollo en el que los jóvenes puedan generar respuestas y acciones adecuadas y coherentes con sus proyectos de vida, de manera que ellos puedan tomar decisiones oportunas con mayor firmeza y convicción.
A través del arte y la cultura, los jóvenes pueden fortalecer sus expresiones internas, participando de manera activa en el desarrollo de técnicas avanzadas de dibujo y pintura, las cuales les permiten reconocer talentos y apropiarse de sus valores y capacidades con mucha mayor seguridad. Los cursos de dibujo y expresión artística también se constituyen en espacios de alegría en los que se fomenta la creatividad y se les da un espacio de distención a los jóvenes para que estos puedan superar situaciones de estrés o traumáticas.
Por medio del fútbol de fomenta el trabajo en equipo, la disciplina, el mantener un estilo de vida sano y activo, así como la construcción de relaciones sociales significativas en las que los jóvenes pueden reconocerse como miembros valiosos de un equipo. El deporte también es un espacio en el que los participantes pueden afianzar su confianza interna y valorarse a sí mismos como determinadores de su propio proyecto de vida, planteándose nuevas metas y desafíos personales.
Por su parte, el programa de danzas, que incluye bailes como el Hip Hop, el Break Dance y otras expresiones lúdicas, es en sí mismo un espacio de aprendizaje, para superar el estrés, reconocer nuevos géneros musicales y tener nuevas expectativas de aprendizaje.
Al final del programa, los jóvenes participantes recibieron un reconocimiento por parte de Bethany, Corprodinco y la ACNUR. Juventud con Paso Firme, un proyecto que ha sido desarrollado con el acompañamiento de docentes profesionales en cada una de las áreas mencionadas, brinda así a todos los menores de edad que han hecho parte del mismo, nuevas herramientas para que estos puedan hacer frente a entornos y desafíos complejos que se viven en medio de la difícil realidad de la migración.